La corrosión en los sistemas lineales
La oxidación, siempre ha sido uno de los retos al que los fabricantes de maquinaria, o cualquier responsable de mantenimiento, ha tenido que enfrentarse en algún momento.
Las propias condiciones de los procesos productivos, las operaciones de limpieza con agua o productos muy corrosivos hace difícil, por ejemplo, mantener un sistema de guiado lineal en óptimas condiciones durante mucho tiempo. Esto obliga a tener que sustituir guías, patines, rodamientos lineales, ejes… y otros elementos, que al no poder protegerse quedan expuestos al agua, condensación, productos químicos, etc.
Siempre se ha relacionado esta necesidad de proteger de la corrosión a los elementos de una instalación, a los sectores de alimentación, embotellado, packaging y otros similares. Sectores donde la higiene ha de ser escrupulosa y los procesos de limpieza, como comentábamos, son muy exigentes y recurrentes.
Pero existen otras aplicaciones y sectores donde la corrosión también está presente. El sector de la máquina herramienta, en general, aísla sus conjuntos de transmisión y guiado lineal con protecciones telescópicas o de fuelle, para que la abundante taladrina que se utiliza en los procesos de mecanizado, o las virutas resultantes de estos, no puedan dañar los citados elementos.
Desgraciadamente, esto no asegura el éxito y hemos visto casos, en los que la simple acumulación de taladrina o una evacuación deficiente de esta de las zonas inferiores de la máquina, genera una condensación capaz de dañar a las guías y a los patines, sin que, ni siquiera, el líquido entre en contacto con ellos. Esto provoca el deterioro de los rascadores longitudinales de los patines y permite que el óxido penetre en su interior. De esta manera es el propio patín, quien esparce el óxido por la guía durante el deslizamiento.
Las consecuencias que esto genera son de sobra conocidas y la intervención necesaria para subsanar el daño, conlleva el desmontaje de todos los elementos superiores hasta llegar al guiado lineal para sustituirlo por completo.
La utilización del queroseno, en líneas de procesado de bobinas del sector siderometalúrgico para labores de limpieza, es altamente dañina en los sistemas de guiado lineal que en estas instalaciones se montan para sencillas operaciones de cambio de formato o posicionamiento.
Aunque estas operaciones no estén en el corazón del proceso, son fundamentales para la correcta operatividad de este.
Además, los conjuntos de guiado lineal han de mantenerse en un estado óptimo para no suponer un problema.
Más crítico es aún, cuando el sistema lineal participa directamente en el proceso de transformado, como, por ejemplo, una cizalla rotativa de una línea de corte transversal.
La exigencia dinámica de esta aplicación y los ciclos de trabajo a los que estas instalaciones se ven sometidos, convierte en vital una correcta elección del conjunto patín/guía en lo que a dimensionamiento se refiere, pero también, en lo que a material a utilizar concierne.
En definitiva, con los ejemplos arriba citados, se puede concluir que el problema de la oxidación afecta a más sectores que al conocido como “Food & Beverage”. Aunque es este sin duda, quien necesita de las soluciones más avanzadas en lo que respecta a materiales y tratamientos.
En la tabla inferior se puede observar las diferentes soluciones de las que disponemos en Dexis Ibérica, de la mano del fabricante de guiados lineales IKO, para abarcar un amplio espectro de ambientes y aplicaciones.
Los diferentes retos a los que nos hemos enfrentado durante muchos años nos han ayudado a acumular a experiencia que nos ayuda a seleccionar la solución que mejor se ajuste a cada necesidad. Conteniendo los costes de la primera instalación, pero sin duda, reduciéndolos a corto plazo por la eliminación de reiteradas paradas para sustituir equipos dañados por la corrosión.
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